jueves, 1 de enero de 2009

¿Qué yo qué?

He decidido no ir a comprar ropa por un buen tiempo...


¿Porqué?

Empecemos por dejar claro algo:

Sé un poco de moda.


Sé quien es Donatella Versace, Oscar de la Renta, Vera Wang, Jimmy Choo y demás diseñadores famosos.


Sé que colores combinan, que prenda te hace ver mejor, que accesorios son mejores.


Sé sobre tipos de tela y colores.


Pero nunca le he puesto mucho empeño a mi propia apariencia, desde pequeña para mí lo importante fue estar cómoda, los vestidos floreados que mi mamá me ponía desde mi primer año de vida entorpecían tareas como escalar cajones para llegar a las cosas que tomaba para luego lanzar por la ventana.

Innumerables fueron las ocasiones en las cuales mis medias cubanas con bobos y ballerinas de charol negro reluciente se ensuciaban de barro, pasta dental, talco y cualquier otra sustancia que estuviera a disposción de mis experimentos.

Al crecer, el bluejean fue la principal pieza de mi ropa, siendo reemplazado en un momento de confusión por pantalones anchos de deporte, poleras con capucha, zapatillas Nike y mis 50 gorras deportivas de los Yankees de Nueva York... Si, yo era Missy Elliot.

Gracias al cielo, la etapa de hip-hop duró muy poco y regresé a los jeans, polos y zapatillas que tan útiles me resultaban.



Nunca usaba vestidos, cuando tenía 14 años y 11 meses recordé que al cumplir 15 años debería usar vestido para mi fiesta.

No me emocionaba mucho ¿Qué tiene de interesante la moda? me preguntaba constantemente, ¿Qué tiene de bueno usar vestido?.


Nada, mi madre fue en secreto a elegir mi vestido, le hizo un par de arreglos y el día de mi cumpleaños... lo vi.


Un hermoso vestido color verde claro tipo sirena del cual me enamoré, lo usé todo el día, incluso mi acompañante (ya, chambelán, a quien por cierto volví a ver hacer poco y me alegró mucho verlo, ya contaré eso en otro momento) me preguntó el color del vestido para que su corbata pudiera combinar con mi vestido y lo hizo, lindo detalle.



Bueno, desde mi fiesta de 15 años, cambiaron mis gustos (algunos para mal) la etapa más complicada de mi vida llegó, duró 2 años y en esos dos años empecé a "Cosmopolizarme".


¿Qué quiere decir? Que empecé a leer Cosmo (duh!) y a interesarme en temas de moda, veía uno que otro desfile de modas, veía si algún vestido en alguna tienda limeña se parecía a los que veía en el Fashion Week.

Actualmente es un hobbie, un gusto el ir de compras y saber que prenda usó tal modelo en qué pasarela o ver si aún venden esa blusa de la temporada pasada que quisiste y no compraste y hace poco una persona asesinó sin compasión alguna ese gusto, al menos por un tiempo.

Increíble como un comentario te puede mover la mente al punto de no entender una simple frase.

Hace 2 semanas fui de compras y mi hermana me hizo un comentario que me dejó algo pensativa:

-"Toda la ropa que compras parece para embarazada"-

¿A qué se refería con eso?





Pues a las blusas y vestidos Joss Stonescos (mire la foto de arriba) son vestidos y blusas "hippies" anchas que sólo son ajustados hasta debajo de la línea del busto y luego son sueltas, como de embarazada, pero no fue ese comentario el que me mató el gustó por la moda.


Nunca noté que la ropa que usaba tenía algo de "maternal" pero en fin, obviando el comentario de mi hermana seguimos comprando.

Llegamos a la siguiente tienda dónde pregunté por un vestido parecido al de la fotografía líneas abajo.Tomé el vestido y sosteniendo el gancho del que estaba colgado lo observé unos segundos, me gustaba, así que decidí probarmelo.

En el probador, me puse el vestido y salí del vestidor con el vestido puesto para escuchar la opinion de mi hermana, quien me tiene una paciencia de ángel al momento de comprar ropa, me miró al espejo y digo en voz alta:

-"¿Qué tal?"-

-"Hippie... te queda bien, no me gusta....pero repito... te queda bien"-

Eso era una opinión sincera, mi hermana se rie y se aleja para buscar algo para ella, mientras me observo en el espejo unos segundos más y se acerca la vendedora me mira y me dice:

-"Se ve muy bien... ¿Hace cuánto se operó?"-

No entendí la pregunta, ¿Sabría esta mujer que me rompí la clavícula? ¿Porqué me preguntaba eso?

-"¿Perdón?"-

Le respondí.

-"Le queda muy bien el vestido, claro, cuando te operas los senos la ropa te queda mejor automáticamente... le recomiendo que se lleve el vestido señorita"-

No estaba muy segura si debía golpearla o reirme.

-"¿Cree que me operado los senos?"-

Dije sonriendo sin dejar de mirarla en el espejo.

-"¿Qué no se ha operado? Ay disculpeme! Es que parece..."-

La vendedora se puso roja, yo me reí mientras regresaba al probador con ganas de matar a la mujer. Me puse la ropa y salí del probador, confundida todavía, sin saber si había sido eso un cumplido o un insulto, me acerqué donde ella y le devuelvo el vestido diciéndole:

-"Gracias, pero estoy buscando otro tipo de vestido"-

La mujer me mira de abajo hacía arriba pues soy varios centímetros más alta que ella y me dijo:

-"Ay que verguenza, es que hubiera jurado que usted se había operado los senos..."-

Sonriendo forzadamente, busco a mi hermana y salgo de la tienda...

1 comentario:

Anónimo dijo...

jajaja, la verdad no me parece que fuera un insulto...y esos vestidos y ropa están tan de moda que...mmm...¡vivan las embarazadas!