No recuerdo desde cuando, pero sé que siempre he encontrando horrible ese ritual escolar de enviar la anotación para invitar al padre al colegio a hablar de su hija/hijo, las veces que llamaban a mi madre al colegio le decía que me parecía injusto que hablaran de mí a mis espaldas y si yo estar presente para poder defenderme.
Hoy, tuve mi primera cita con un padre de familia en el colegio y fue horrible, desde el día en que contrataron dejé en claro que yo no quiero tener trato con los padres; de ser posible no quería ni hablar con los padres pues me pone nerviosa esa confrontanción que en la mayoría de veces es para decir que su hija/hijo es un/a futuro/a pirañita.
Te ves obligada a conocer y entablar una conversación con alguien a quien no conoces y no sabes cómo reaccionarás ¿Cómo reaccioné yo? MAL. Me cansé de escuchar a la señora y decidí simplemente darle por su lado cual loca sin darme cuenta de que creaba un problema más grande, lo único que pasaba por mi mente era "¿Ya?".
Así que, mi primera cita con un padre de familia fue un desastre, desastrre del que está al tanto dirección para que me digan que carajo hacer la próxima vez que un padre venga.
a. Huir por el techo
b. Ignorarlo
c. Hacerme pasar por alumna y huir
En fin, hoy es el cumpleaños de mi madre por lo que tengo que tragarme mis problemas y sonreir hasta que se me adormezca la mandíbula, mañana podré relajarme, ¿Cómo? No sé.
Un beso.
No vayan a los colegios de sus hijos!
Dejen trabajar a las profesoras jóvenes!
Adiós.
No hay comentarios:
Publicar un comentario